2008-12-25

Mil cariños a mis amigos bloggeros!!
-Desde mi querida Santiago de Chile-

2008-11-01

Es la expresión más aproximada que he escuchado acerca de mi egocéntrica persona: "Se arranca sola."
Es difícil ligarme a algo o a alguien durante mucho tiempo. Más difícil me resulta escribir en tercera persona, del otro o de la otra, cuando estoy inmersa en mi propio vaso alucinada por mis burbujas. Nada hay de excepcional aquí dentro pero si de diferente; si apareciese un captor de buenas almas -mansas- infartaría apenas deslizase medio cuerpo en mi corriente. ¿A quién podría interesarle entonces leerme? He guardado los últimos libros que adquirí sin terminar su lectura, hace semanas que no concurro al teatro, veo poco cine y sigo dada a mis actividades de siempre, mientras nado intentando salvaguardar mi individualidad en este punto de la geografía donde el chisme al igual que la descalificación pública es deporte nacional.
En Montevideo era diferente: apenas con su millón y medio de habitantes, la civilizada aldea no permite a nivel público lo que de este lado es una confesa pasión de alcance masivo. En este reino de la entretención y del divertimento el que teje más culebrones y los enreda mejor es el más aceptado, defendido y temido, porque quien lo acepta y defiende lo hace consciente de que en cualquier momento puede aquel ser su verdugo y ensañarse de la manera más vil contra su persona.
Pero he descubierto el talón de aquiles de este vulnerable aprendiz de malvado:apenas direcciono una sutil observación hacia su accionar -no directamente hacia su persona- se le enciende el rostro y desborda su vaso. Desborda en furia de su vanidad herida que le baña los ojos -esos ojos con indicios aborígenes que él y sus conciudadanos niegan en concenso- el portazo no se hace esperar y su aire ofendido inunda todo el ambiente.
(Porque este es un pueblo muy pero muy sensible, no indiferente, no de guante suave y mano dura como el montevideano.) Y comienzo a hablar de ese tercero, de ese otro, porque me resulta un ejemplar fascinante. Desde su declaración de inferioridad explícita en su envidia proverbial hasta en ese "hola, qué tal; ¿pasó algo?"-como si nada-. Es digno de atención según lo señala mi gusto, nunca hay aburrimiento mientras elucubra y generosamente siembra la duda y la discordia a todos y contra todos.
Anhela quizás ser aceptado y sigue el modelo imperante en este medio surrealista donde hay que destacarse diciendo cualquier cosa, mejor cuanto más antisonante. Si alguno de los allegados al virtuoso se digna hacerle ver la realidad desde otro vértice, aquél, más ofendido y furioso aún, lo declarará "traidor", haciéndole recuento de favores que podría dejar de recibir si el atrevido persiste en sus no solicitadas observaciones.
Hay mucho tango en malos aires. Y a este post se le contagia...
Vuelvo a mi corriente, intento no interrrumpirla con aquello que mi cabecita ha decidido no ignorar ... Pero no me resulta fácil ser indiferente al dolor de ese otro, al grito desesperado de su yo alienado ... ¿Cuánto resentimiento puede un ser humano guardar? ¿Cuántas humillaciones le trajeron ese dolor que ahora reparte gratuitamente entre los demás?
Hay brisa de verano allí afuera, solo me apetece salir al encuentro de alfombras verdes, perder mis ojos entre un follaje denso, entregarme al llamado de ese ser primitivo que todos llevamos dentro. Me dejo acariciar por el sol un par de horas previas al atardecer, cuando comprendo que este cielo es igual de celeste que aquel otro y tiene también sus nubes blancas aunque a su sombra cada pueblo maduró sus propios matices, distintas formas, estilos de comunicación diferentes ... Y me dejo seducir por las cosas que nos unen, ésta noche el infaltable asado en casa de amigos, el café que se prolongará hasta cercano el amanecer...
Llevo conmigo las paredes de la que fué mi otra casa: la fundamental. Traigo conmigo el eco de quien ya no está pero dejó huella firme mientras me construía. Porque nadie se hace solo ... Y no faltan los sermones de mamá llegando desde la otra orilla...

2008-09-21

Y qué más da si todo acabó después de esa tormenta, si el allá es la nada y nos dirigimos a ninguna parte. Si aquel cortado fué el último que tomamos juntos y la horrible corbata rosa que te quitaste no volví a anudarla a tu camisa. Vos allá, yo acá; continuamos planificando, produciendo -produciéndonos- mientras la
vida se nos escabulle a paso ligero sin enviarnos oportunidad de recupero.
Mis ganas por vivir pueden más que tus ideas de pretendida trascendencia. Que tengas mil hijos, que sonrías de felicidad cuando te despierten sus llantos pasada la medianoche -te conozco tan bien: no delegarías ese honor a una tercera persona- ... Que puedas sonreír cuando de mi te acuerdes..
Yo permanezco en lo terrenal; aún quedan rabas y jugosos arándanos que morder.
Que tu podado jardín florezca y lo riegues pacientemente cada mañana. Prefiero sumar kilómetros corriendo tras la nada, con el viendo golpeándome las mejillas.
Te guardo en las mejores vueltas de página ... y celebraría con buenísimas ganas el reencuentro.
Nadie crea que no te extraño; si así fuera no estaría pensándote.
(Pero yo no guardo flores secas.)

2008-08-31

Primavera entrando por los ojos, colándose bajo la falda del vestido; de brisa ligera y sol audaz. Septiembre con aroma a jacarandá y traje de hierba fresca; con postales de libros abiertos en parques y plazas. Con besos descendiendo por cuellos despojados de pesados sweaters. Con perfectos informales veinte grados, invitando a la salida de shopping, a renovar guardarropas. Los mismos libros que exhibieron durante la semana hoy despiertan más atractivo; "Las viudas rojas", de Esteban Valenti, destacado en estantes y mesas de las librerías. -Pese al color de tapa que lesiona mi gusto me tentó conocer su faceta de novelista- La próxima semana cruzaré a Montevideo, a mi orilla, para cumplir el ritual de caminar la calle de árboles más bellos -calle Canelones-; bajar a la rambla de Carrasco por Santander; practicar jogging por rambla de México junto al puerto del Buceo; mimarme en los cafés del populoso Pocitos; apretarme en los brazos de Arizona -en mi Malvin de mil amigos-; atreverme al otro lado de la ciudad y atravesar la Ciudadela, donde reinan Gurvich y Torres García; al encuentro de noches de pubs y bohemia, perdiéndome en páginas sepia entre sus paisajes antiguos. Seguiré veleros en dirección este, donde el río ancho como mar irá confundiéndose de puro Atlántico; y, al regreso disfrutaré la Colonia de aire lusitano plagada de viajeros en tránsito entre una y otra capital del Plata.
La tarde llegó envuelta en crêpes de dulce de leche -para no perder la tradición- y esto sabe a hogar después de moler el café. Me pregunto qué película veré, mientras aún no me abandona esa pequeña dicha que atrapé viendo Francesca e Anunziata -alguien insitió en que había que verla y se lo agradezco- y el teléfono está calmo -desconectado- y el móvil lo apagué.
Necesito recuperar sueño y energías antes que anochezca.

2008-08-18

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Estas palabras marcan el límite del mundo que habito; me delatan tanto o más que los gestos... Hoy no logro expresar esta otra plenitud, esta rara serenidad -cuánto durará... -; nada desbordante pero que sacian este instante.
Me encuentro, "soy ésta" me repito, mientras siento el temblor de la rama que estoy abandonando.
Otra vuelta de página.
Mis ojos se sorprenden ante tanta libertad como un niño ante una canasta llena de golosinas.
Perder para ganar ... -pero esta puerta que dejaré atrás me cerrará otras-
Un salto al vacío, quizás. Y en vez de pensar canto: "El vacío está lleno de aire". (hehee)
Empiezo a asimilar esta ciudad en la que son incontables los sitios en los que ya me reconozco. Aquí decido quedarme, a cuarenta y cinco minutos de la que ya no será mi casa.
Dudo que estos sean buenos aires. Me quedo igual.
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Mi rambla está río de por medio, frente a una isla habitada solo por gaviotas.
(Mi vuelo de gaviota termina hoy)
Desde las nuevas ventanas no veré el río. Tengo que abrirme a nuevas cosas. Y perderme... Un vuelo seguirá a otro o, quizá, me conforme con un andar calmo; o arranque a doscientos... La velocidad me desafía y me seduce tanto como esta novedosa calma.
Hoy el mundo me pertenece -éste, mi pequeño mundo, pero más amplio que el de ayer-.
Moldearé mi propio tiempo -ojalá él no a mi-. Comienzo a resbalar en mis propios deseos.

2008-07-27

Conduciría aún con lluvia -pero estoy aquí- y daría ágilmente vuelta de página, una a una, hasta llegar a la del color que prefiero. El extraño malestar físico no me abandona y desde hace varios días no desdeño de su compañía, su impaciente presencia y nuestros silencios.
Su expresionismo me seduce cuando habla con los demás, al igual que esa inusual mirada tierna. (Te comportás diferente cuando excepcionalmente me quedo en casa) Imposible evitar alguna señal de debilidad cuando al incorporarme todo en la sala gira como si me hubiera tomado un litro de vodka. -Nunca tomé tanta pero me comentaron que así se siente- Parece increíble, como un hombre se contenta una tarde vegetando absorto frente a las imágenes de unos tipos corriendo tras una esfera -siempre tras algo redondo-, con un jarro helado en sus manos y sabiéndose necesitado - temporalmente- por una mujer que hoy se muestra un poco frágil.
Esperaba pasar de este momento para postear pero, como ven, cambié de idea. Aquí anclada, temerosa de ir más allá de la puerta, dependiente, necesariamente agradecida -aunque no lo parece- y deseosa, de salir "a tierra firme" -hehee- y fantaseando en dar un buen puntapiés. (Eso vendrá después, quizá en unos días o en un par de horas)
Quien sabe.

2008-07-20

"Algo así...", respondí; "quizás"...; y, finalmente: "más o menos". La interrogante dirigida sobre mi estado civil lo dejó con más dudas... La noche transcurrió tranquila, no siguió cine a la salida del restaurant. La cama fué solo mía -la exclusividad me durará poco- y el sueño no me hizo esperar -como siempre-. (En la tarde desembarcarán maletas rumbo a esta dirección) Te dejo a "Pelo", deseoso de darte la bienvenida. "Hay que bajarlo al parque"; "Avisáme a qué hora vuelvo a cenar", ... no se me olvida anotarte nada más, creo. Mucha gente se pregunta cómo podemos vivir así... Para mi gusto nuestra relación marcha bien. Vamos por caminos diferentes; ocasionalmente coincidimos: en el cruce. Los viejos amigos -que ya no frecuentamos- nos llaman a menudo y ponen énfasis en la alegría que les provoca el que seamos la pareja que aún sobrevive desde entonces. (Durante los últimos seis años sus vidas han dado giros insospechados.) En la mía, cambiaron los paisajes, geográficos y humanos, pero, básicamente hago lo de siempre: diferentes cosas. Allá lejos, están las páginas de idilios, de adolescencia... Y no estoy hecha para tantas abstracciones. Salgo a tierra firme, se a dónde me dirijo. Nada espero. De nadie.

2008-07-12

Irreverentes, pasados por mar, y, ardientes, pese a tanta agua. Inspirados en clandestinos encuentros con Matilde en Atlántida, escritos en La Sebastiana o en Isla Negra, bañados por el mar de Isla de Capri... Salidos de su puño excéntrico, libertario... "Versos del Capitán." Me reconozco en su amor incondicional al azul profundo: "No hay más estrella que el mar", escribió aquel chileno nacido un 12 de julio. Disfruté visitar sus casas-museo, releer sus anécdotas -reales o inventadas-, su descripción magistral del entorno que lo vió crecer. Puede o no gustarte la poesía pero no te resultará indiferente la personalidad de Neruda. Pertenece a "esa otra creación"; una vez que te sumerjas en sus aguas ya no querrás salir.

2008-07-05

Durante esta semana he tenido la suerte de recibir una avalancha de buenas noticias. Y no me refiero solo a las vinculadas directamente a mi persona: mis amigos/as están contentos, -en general- motivados, los veo vivir el HOY; en resumen, diría que se respira un aire mejor en mi ambiente laboral, en las reuniones particulares... "Tenés un andar feliz", me rumoreó uno por ahí... Estoy bastante descreída de aquel ideal de "felicidad" artificial que se nos vendió en libros, en base a ejercicios y meditación; hasta mediante un estilo de alimentación -¿quién no se enroló a los hábitos macrobióticos?- ... Hoy día me importa un pepino ese rollo de la felicidad. Me interesa vivir sin estorbar pero sin ponerme la máscara de la complicidad ante todo el mundo las veintitantas horas. (También descreo que sean 24; son apenas algunas y monedas) Se me antojó esta tarde caminar la ciudad, ser transeúnte y mirar. El aire húmedo, casi cálido rebeló a mi cabello tan dócil en apariencia, tan camufladamente prolijo... Quizá ese sea el punto del "feliz andar".

2008-06-29

Abandonar la suavidad de la bossa o fusionarla con la emoción del tango? Me invade últimamente una pasión tanguera; anoche me estremecí en una sala de cine con "Café de maestros", de Santaolalla. Hoy no me despertó Vinicius... Creí escuchar acordes de bandoneón durante la ducha y hasta al cruzar la calle para comprar medialunas. Las nubes comienzan a ceder espacio al sol mientras la tarde despabila la modorra de la ciudad. Se anuncia tango para esta noche y las venideras. Brasil quedó lejos.

2008-06-16

Hay un segmento de esos veintidós kilómetros de rambla que conforman esta ciudad que ya no habito del cual no he logrado arrancarme. Estoy en la margen occidental de aquel mar azul -aquí mal llamado río- intentando iniciar este nuevo blog. Con las primeras palabras que se me ocurre escribir, un día que coincidentemente es franco en ambas orillas. Cuando el café desplaza al mediodía y la mesa diaria está servida de periódicos que aún no leí. ¡Feliz día de la orientalidad! para los orientales -"uruguayos"- que crucen a esta bitácora y un abrazo fuerte a mis amigos de siempre. No sé por qué razón me ausenté durante tanto tiempo de la blogo ni por qué hoy precisamente regreso a dar lata. Nada de lo que aquí escribo tiene otra finalidad que la de mantener ese vínculo que nos liga desde hace unos años. Espero antirecetas de cómo hacer el blog, novedades de aquello que no podría haber ocurrido y crónicas desde cualquier isla, rambla junto al mar o desde el medio del desierto. -Se aceptan náufragos por vocación- ...( A mucha gente se nos perdió la brújula.)