"Sé y me gusta hacer cosas. Sé hacer fuego, pintar paredes, traducir, enseñar, hacer un jardín, enseñar a un perro, encuadernar, hacer ginebra": Con estas palabras se definía la escritora Idea Vilariño, quien falleció el martes, en Montevideo. A la edad de 88 años era una de las sobrevivientes de la generación literaria llamada "del ´45" -aquella integrada por Onetti, Benedetti, Claps, Berenguer, entre otros-. Sus poemas de estilo despojado, directo, contundente, sin grandilocuencias, habían sido censurados décadas atrás durante el régimen militar, y algunos, anteriormente, hasta por el vanguardista semanario Marcha.
Vivió toda su vida en su ciudad y aunque fue premiada internacionalmente siempre rechazó tales distinciones. Militante de izquierda, docente, co-fundadora de revistas literarias, traductora, ensayista ... , esta mujer "misteriosa y solitaria" -según palabras de Benedetti- de sangre gallega e italiana, era hija de padre anarquista y madre católica, hermana de Alma, Poema, Numen y Azul.
"Nos moriremos sin apender a hablarnos," había declarado en referencia a Juan Carlos Onetti, con quien compartió momentos intensos en una época de efervescencia cultural y política cuando comenzaba el deterioro económico y social en Uruguay.
"Me inhibiste siempre en todo," le confesó Onetti que, tiempo después se refugió en España, mientras Idea fue uno de los contados intelectuales que resistió al exilio. Durante la dictadura escribió canciones que fueron emblemas de la resistencia.
Pero se va se pierde no se detiene fluye mana incansablemente se escapa de las manos corre vuela a su fin se desliza se apaga se aniquila se extingue se deshace se acaba
Idea Vilariño (1920-2009)